Cuando se escucha ese dicho que apunta que en la vida hay tres cosas, salud, dinero y amor, muchas veces se suele despreciar al primero, el que hace referencia a la salud. El ser humano es bastante avaricioso y eso es lo que hace que se ponga por delante a un bien material como lo es el dinero a la salud, que es la que sostiene nuestra vida y la que determina la calidad de la misma y el bienestar del que disponemos nosotros y nuestra familia. Valorar más a la salud es una asignatura pendiente que todos y todas tenemos.