A lo largo de la historia las personas se han hecho preguntas sobre las razones de su sufrimiento y los medios para poder aliviarlo. Antes o después a todos nos pasa que podemos estar en un momento en el que no me siento bien o donde queremos dejar de pasarlo mal.
¿Qué es realmente el Mindfulness?
El Mindfulness, también llamado atención plena,como nos confirman los expertos de Inspirare.es, es una forma fácil de ayuda para mitigar el sufrimiento. Se puede definir como el arte en el que se hacen conscientes las sensaciones que muchas veces en nuestro cuerpo suelen pasar desapercibidas. Aunque tenemos esta habilidad, lo cierto es que no se suele utilizar de manera consciente y casi nunca se hace más que por unos pocos segundos de tiempo.
Pensamos habitualmente que el mindfulness no es algo que sea novedoso, pero tenemos que remontarnos a la tradición budista de la meditación, la cual tiene más de 2500 años de antigüedad.
¿Quién se puede beneficiar de practicar Mindfulness?
Todo el mundo puede llegar a sacar beneficios de lo más interesantes de la práctica del mindfulness. Hay que tener en cuenta que muchos profesionales del mundo asistencial son los que sufren más los efectos nocivos del gran estrés laboral de forma continuada.
Los profesionales del campo sociosanitario no son algo excepcional y por la naturaleza del trabajo, con frecuencia quedan atrapados en esta clase de situaciones en el campo del estrés crónico. No solo por los efectos del estrés día a día como a largo plazo con las consecuencias nocivas que tiene sobre la propia salud.
Desgraciadamente no todos los profesionales tienen estrategias para afrontar el estrés que sean efectivas y adecuadas. No hay que olvidar que el Mindfulness es de las estrategias que ha terminado por enseñarnos una eficacia más grande a la hora de paliar y prevenir de los efectos de un estrés de manera continuada.
La técnica lo que hace es hundir las raíces en tradiciones de lo más antiguas, donde se eliminan los diferentes efectos que tienen los agentes responsables del estrés y haciendo que nos podamos enfrentar a ellos de manera distinta.
Aquí podemos ver algunos de los beneficios más importantes en lo mental y físico:
El mindfulness que nos ayuda a la mejora de la inteligencia emocional
Varios estudios evidencian de forma clara que practicar el Mindfulness lo que hace es mejorar la autoconsciencia, de tal forma que mejora el autoconocimiento, el cual nos llevará aun reconocimiento mejor de las emociones, tanto las ajenas como las propias. Derivando enuna gestión de las relaciones entre las personas.
El mindfulness lo que hace es potenciar la creatividad de los individuos que lo practican
Cuando llevamos la menta a un estado de tranquilidad, lo cierto es que el Mindfulness puede colaborar a que las ideas cuenten con un mayor espacio para que puedan desplazar a las emociones negativas, caso de las preocupaciones. El centrarse en el momento que se vive actual, esto hace que la persona se sienta más libre y con mayor creatividad.
Practicar mindfulness lo que hace es mejorar la capacidad de concentrarse
De los mayores beneficios que existen en el campo de la concentración plena es que va a favorecer a que se concentre todo en una sola cosa. Todo esto permite que todo lo que una persona pueda hacer, tanto los trabajos complicados como otros más fáciles.
Lo que consigue el mindfulness es enseñarnos a mantener las diferentes distracciones que pueda haber a raya, de tal forma que haya más concentración en lo que estemos haciendo en ese preciso momento.
El mindfulness lucha contra el insomnio
El practicar de forma continua el mindfulness lo que hace es llevar al organismo a un estado de relajación y así se alejan las preocupaciones. Todo se ve reflejado en menos nivel de activación cortical que lo que hace es llevarnos a un estado ideal para incitar al sueño y que mejora la calidad del mismo.
Practicar mindfulness, fulminando el estrés y la ansiedad
Quizá es efecto más estudiado y que hace que el mindfulness es el más conocido. Ya sabemos que el estrés puede llegar a causar hipertensión, así como problemas de corazón y enfermedades coronarios, ansiedad, etc.
La gran utilidad que tiene el mindfulness en la lucha contra la ansiedad y el estrés. Esto hace que estemos en un estado de tranquilidad y claridad a nivel mental, donde se reduce los niveles de cortisol, lo que ayuda a que se detecten las respuestas de estrés y ansiedad en las primeras fases.
Los orígenes del mindfulness, el presente y el futuro
Si hablamos de sus orígenes, hay que pensar que se basan en la tradición budista que se lleva lleva practicando muchos siglos y esa meditación con conciencia plena, consiste en la dirección de nuestra atención de forma consciencia, todo con el objetivo de que aceptemos las cosas, siempre evitando que se establezcan juicios de valor.
Ahora, en nuestra sociedad nos hemos acostumbrado a vivir rápidamente, creando automatismos, que nos hagan más fácil el vivir nuestro día a día. Con frecuencia, solemos recibir con mucha información que no se logra procesar.
Pensamos que este acelerado ritmo de vida que llevamos puede hacer que se acentúen los estados de ánimo de ansiedad y que crezcan las situaciones de estrés. En el caso de que se te diagnostique una enfermedad que sea extraña, seguro que la incertidumbre crece y esos pensamientos en qué será de mí en el futuro vayan a ser mucho más habituales.
La importancia del aquí y ahora
Frecuentemente se invierte mucha parte del día en pensar en el futuro y olvidando el centrarse y disfrutar de lo que se puede tocar, que no es otra cosa que el aquí y el ahora. Hablamos, precisamente, del objetivo más importante que se trabaja en las sesiones de mindfulness.
Aquí es cuando decimos que merece la pena parar y dedicar nuestra atención sobre el hecho de escuchar a nuestro cuerpo y las sensaciones que nos transmita, dándonos la oportunidad de poder reconectar con todo nuestro propio ser.
