Vivimos en un país en el que las tradiciones culinarias son realmente ricas y variadas. A nadie le cabe ninguna duda acerca de la gran calidad de la cocina española, que es conocida en el mundo entero y que, cada año, hace que miles y miles de personas acudan hasta nuestros pueblos y ciudades. Y es que no solo el sol y la playa atraen a los turistas hasta nuestro país. También lo hacen las grandes recetas y los alimentos más potentes de nuestra geografía. Y es que, de hecho, muchas personas de nuestra nacionalidad irían de buena gana a Valencia solo por comer paella.
La alimentación y la cocina se han convertido en una de las mejores maneras de construir una identidad nacional. Y eso, en España, lo sabemos bien. De esto habla un artículo de una página web mexicana llamada Scielo. La cocina tradicional, desde luego, es un reclamo para una enorme cantidad de personas cuando acuden a un lugar en concreto. Siempre es una buena manera, de hecho, de descubrir más acerca de la cultural del lugar al que estamos rindiendo la visita. Y nos puede ayudar a entender sus tradiciones y su historia.
En lo que se refiere a España, hay platos que, desde luego, son típicos y que no se pueden desligar de nuestra enseña nacional. Una relación de ellos la hace el portal web Sky Scanner, que cita un total de 10 platos:
- La tortilla de patatas, que desde luego es una referencia culinaria española.
- El gazpacho, que sobre todo es típico de una zona como lo es Andalucía.
- La paella de la que ya hemos hablado, clave en la Comunidad Valenciana.
- Los calamares en su tinta también merecen un hueco en esta lista tan prestigiosa.
- El chicharro al chacolí, muy propio del País Vasco, es otra de las grandes apuestas culinarias en nuestro país. Ir a Bilbao o San Sebastián y no catarlo es un auténtico delito.
- Las migas de Teruel, como no podía ser de otra manera, también forman parte de este ‘top 10’.
- La escalibada en Cataluña, compuesta con ingredientes como el pimiento rojo o la berenjena, es una receta simplemente espectacular.
- El cocido madrileño es la máxima representación culinaria del centro peninsular.
- La tarta de Santiago es, quizá, uno de los postres más deliciosos de todo el país.
- Las hojuelas de Castilla, desde luego, también forma parte de las principales referencias en materia de repostería.
La gastronomía es una de las cuestiones que más llama la atención sobre un país como lo es el nuestro. Y, sobre todo, la gastronomía elaborada con productos artesanales. La bollería artesanal española, por ejemplo, tiene una fama a nivel mundial muy buena, en función de lo que nos han comentado los profesionales de una entidad como lo es El Molí Pan y Café. Desde luego, en España no todo es paella, gazpacho o jamón. Tenemos muchas más cosas y eso, en efecto, es una de las cuestiones que más orgullosos y orgullosas nos debe hacer sentir.
Una alimentación de primera calidad
Todavía hay mucha gente que, cuando habla de bollería, tiene una concepción negativa y a menudo equivocada de la realidad. Es evidente que la bollería industrial hay que consumirla con cuidado, pero la que es realizada de una manera artesanal tiene propiedades que no tienen por qué ser tan perjudiciales para nuestra salud. Como en todos los sectores alimentarios, lo tradicional es normalmente lo más bueno y lo que mejor sabe.
Este es precisamente uno de los motivos por los que creemos firmemente que la bollería va a seguir mejorando sus registros, especialmente la que es confeccionada den una manera artesanal y tradicional, en los próximos años. Seguramente la producción crezca y, desde luego, si así es también crecerá la facturación. Y es que no es para menos. El enorme sabor que proporciona este tipo de alimentos hace que, desde luego, nos sintamos mucho mejor después de haberlos consumido. Y lo mejor es que la sensación de la que hablamos la experimentan los niños pero también las personas adultas.
Cuidar de nuestra alimentación es una de las tareas más importantes que ha de tener el ser humano a lo largo de su vida. Es cierto que, en muchos casos, no se tiene en cuenta tanto este asunto como se debería. Pero ojo, eso no hace que la bollería tenga que estar en el foco de la crítica. Hay muchos tipos de bollería y muchas maneras de hacerla y confeccionarla. Por lo tanto, sí que es posible cuidar de uno o una misma consumiendo este tipo de productos. Pero, eso sí, siempre os vamos a recomendar que apostéis por lo artesanal y lo tradicional. Eso, en la mayoría de los casos, es sinónimo de calidad.
